por Jorge de Armas
Santiago de Compostela, verano del dos mil y pico.
Santiago de Compostela, verano del dos mil y pico.
Es
agosto, y hay como unos 11 grados. La
noche es fresca, Una llovizna terca intenta impedir que las quinientas personas
que estamos en la Plaza de la Quintana disfrutemos de Paquito D´Rivera.
Sobre
las nueve y algo, el saxofonista sale y mira al público que no se mueve, se
ajusta la bufanda y dice:
-
Como decimo lo cubano ¡Ño, que frío!
El
recital debió empezar sobre las ocho, le queda poco tiempo, a las diez, en el
Obradoiro, justo al lado, Joaquín Sabina regala su voz y sus nostalgias a miles
de mortales entregados.
Paquito,
desde la tarima, clarinete en mano, saluda, con acento más cubano si cabe en
esas condiciones, y provoca aplausos de todas partes. Pregunta “¿Aquí hay mucho
cubano no?” y todos, creo que todos, siendo cubanos o no, de alguna manera nos
reconocimos y gritamos. Con el
clarinete, ejecuta los primeros compases del Himno de Bayamo, y entre el frío y
la emoción, los cubanos, todos, esa noche gélida, entramos en calor.
Entonces
entra Michel Camilo, llueve un poco más fuerte, y se sienta en el piano y
empieza a tocar maravillas, Paquito pone cara de susto, y lo sigue, y así pasan
unos veinte minutos donde la magia de la música detuvo la lluvia, el frio, y
alimento mil recuerdos. Michel descargaba montunos inventados y Paquito
reconstruía la verdad de mi música.
-
Esto no estaba preparado – dice el cubano.
-
Ni falta que nos hace – responde el dominicano.
Y
Paquito empieza a hablar, hace chistes de Álvarez Guedes, algunos gallegos no
entienden por qué los cubanos nos cagábamos de risa. Una pieza más, esta vez
corta, pero especial, este dúo, en menos de media hora, regaló sentimiento, y
ante eso, a los humanos sólo nos queda agradecer.
Cuando
decidimos vivir fuera de la Isla, hay momentos en los que olvidas quién eres, o
cómo has sido, y corres el riesgo de perderte. Pero hay ángeles que te
devuelven a lo que nunca dejaste de ser.
Paquito D´Rivera es uno de ellos, tiene el don, la magia, desde su arte
inmenso, de devolverte la cubanía.
(Ayer Paquito D´Rivera obtuvo su quinto
Grammy, por el D’Rivera rivera recibió el premio al Mejor
Album de Jazz Latino por Song for Maura, realizado en colaboración con el trío
brasileño Corrente)